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Cultura del café

Latte Art: cómo como disfrutar de la leche con tu cafetera dibujando en tu cafe

Aunque el primer creador de esta técnica sigue siendo desconocido, el Latte Art es un fenómeno internacional que parece haber sido provocado por un barista nacido en Verona por el nombre de Pierangelo Merlo que descubrió, mientras que hizo uno de muchos cappuccinos, que era posible crear formas similares a corazones, hojas y manzanas vertiendo leche espumosa en la superficie del café espresso. 

Al preparar la leche, la temperatura es un elemento crucial tanto al principio como al final del proceso. Lo primero que hay que hacer para garantizar un tiempo de formación de espuma correcto es empezar con la leche recién sacada del frigorífico.

La temperatura final también es crítica: cuando la leche supera los 65 o 70 °C, las grasas que contiene comienzan a separarse, y esto no solo lleva a una pérdida de textura sino también a una suavidad del sabor del café.

Para empezar, la taza de café debe sostenerse con una mano e inclinarse ligeramente para facilitar la creación de un “patrón de café latte” sin tener que mover demasiado el vaporizador de leche. Luego sostén el vaporizador de leche entre 2 a 3 centímetros por encima de la taza y empieza a verter lentamente la leche en ella.

Acerca el vaporizador de leche con cuidado a la taza e inclínala con el pulgar para acelerar ligeramente el vertido.

Ahora mueve el vaporizador de leche suavemente hacia delante y hacia atrás para empezar a crear un patrón en zigzag.

Por último, retrocede el vaporizador de leche hacia el borde de la taza que esté más cerca de ti mientras enderezas la taza.

Reduce la velocidad de tu vertido ligeramente, levanta la jarra alrededor de un centímetro por encima de la taza plana y rocía un pequeño chorro de leche de nuevo a través del centro de la taza para terminar el patrón rosetta.

Consejos rápidos y cosas que debes saber para disfrutar de la leche con tu cafetera

  • Limpia el tubo de vapor con una pequeña cantidad del propio vapor antes de usarlo y límpialo con un paño. Esto garantiza que el flujo sea correcto y que no haya depósitos residuales de grasa en la leche.
  • Limpia el tubo de vapor antes y después de usarlo, con cuidado de pasar un paño después.
  • Llena la jarra de leche de acero inoxidable hasta aproximadamente 1/3 de su capacidad, ya que al calentar leche al vapor aumentará su volumen.
  • Al hacer latte art con leche, la práctica hace al maestro. El truco para determinar la temperatura correcta de la leche es sostener la jarra con la mano dominante mientras se calienta al vapor. Si no puedes mantenerla durante más de 3 segundos consecutivos, la temperatura es perfecta y es hora de apagar la manguera del vapor. Como alternativa, puedes utilizar un termómetro de temperatura de espuma de leche.
  • Lo mejor es usar siempre leche fría, recién sacada del frigorífico y no recalentar nunca. De hecho, la leche fría permite que las proteínas, que son sensibles para crear y estabilizar la espuma, se unan en un enlace estable.
  • Cuando hayas terminado de calentar al vapor, gira la jarra y da golpecitos suaves en la superficie para eliminar las burbujas no deseadas de la leche.

Ver el primer paso de la cultura del café

Preparando el escenario para la taza de espresso perfecta